--¿Qué es el estudio macrobotánico?--
Los restos de plantas carbonizados (quemados), se consideran útiles para su análisis, ya que una vez carbonizados, estos pueden conservarse durante miles de años. Aunque las semillas carbonizadas, madera y otras partes pertenecientes a plantas, se consideraran artefactos macrobotánicos (visibles a simple vista). Su recolección requiere la aplicación de técnicas adicionales utilizadas por los arqueólogos en el campo. En el caso de restos macrobotánicos, la flotación es generalmente necesaria.
La flotación básicamente, procura separar la matriz de suelo de los restos de plantas que flotan en la superficie. Esto es posible, ya que los sedimentos en sí no flotan, caso contrario a los restos de plantas carbonizados las cuales quedan suspendidas en la superficie, ya que son menos densos que las rocas. Esta simple y eficaz técnica, ha permitido a los arqueólogos recuperar evidencia, la cual brinda una perspectiva distinta sobre la dieta y uso de plantas en general de las antiguas sociedades. La flotación se lleva a cabo utilizando sistemas manuales o mecanizados; ambos tienen sus ventajas y desventajas.
A continuación expongo los dos sistemas manuales y mecanizados, así como los procedimientos básicos de laboratorio.
La flotación básicamente, procura separar la matriz de suelo de los restos de plantas que flotan en la superficie. Esto es posible, ya que los sedimentos en sí no flotan, caso contrario a los restos de plantas carbonizados las cuales quedan suspendidas en la superficie, ya que son menos densos que las rocas. Esta simple y eficaz técnica, ha permitido a los arqueólogos recuperar evidencia, la cual brinda una perspectiva distinta sobre la dieta y uso de plantas en general de las antiguas sociedades. La flotación se lleva a cabo utilizando sistemas manuales o mecanizados; ambos tienen sus ventajas y desventajas.
A continuación expongo los dos sistemas manuales y mecanizados, así como los procedimientos básicos de laboratorio.
Flotación Manual
Flotación manual empleando una cubeta. Imagen tomada en el sitio arqueológico La Corona.
La forma básica para recuperar restos botánicos, se realiza a través de la flotación. Los sedimentos o restos de suelo son colocados en una cubeta, a la cual se añade agua, arremolinando su contenido, luego se vierte cuidadosamente en un tamiz. En este tamiz se capturan las partículas más ligeras, mientras que los restos de plantas más pesadas quedarán en la cubeta.
La flotación manual suele ser económica y fácil de instalar, especialmente en el campo. Sin embargo, puede llevar mucho tiempo y mano de obra intensiva. No es recomendable en el procesamiento de sedimentos que presentan muestras muy grandes.
Siga este enlace para ver un vídeo sobre la flotación con cubeta elaborado por Dorian Fuller: Haga clic AQUÍ.
La flotación manual suele ser económica y fácil de instalar, especialmente en el campo. Sin embargo, puede llevar mucho tiempo y mano de obra intensiva. No es recomendable en el procesamiento de sedimentos que presentan muestras muy grandes.
Siga este enlace para ver un vídeo sobre la flotación con cubeta elaborado por Dorian Fuller: Haga clic AQUÍ.
Máquinas de Flotación
Equipo que utilicé para realizar la flotación de muestras de suelo. Ciudad de Guatemala.
Desde el desarrollo de la máquina para flotación, se han hecho modificaciones a varios aparatos. El que se muestra aquí (a la derecha), es una modificación de la máquina SMAP (Proyecto Arqueológico Shell Mound). El agua no se recicla y por lo tanto, esta máquina, particularmente, es la más adecuada a utilizar en lugares donde el acceso al líquido vital no es un problema.
Esta máquina traslada el agua que sube desde su base, y por lo tanto permite que los materiales más ligeros puedan flotar en la superficie suavemente y verterse en un tamiz. El material que se deposita en el tamiz es la fracción más ligera, mientras que los artefactos depositados en el tanque, se identifican como la fracción pesada.
Aunque esto permite que muestras mucho más grandes sean procesadas, al contrario de la flotación manual, ésta requiere la pericia de un soldador, así como el acceso a piezas tales como tanques de almacenamiento y material de plomería.
Algunas máquinas de flotación, por ejemplo la Flote-Tech, permite que el agua sea reciclada (por lo que el agua no necesita ser cambiada después de obtener cada muestra). La construcción de esta máquina tiene un alto costo, sin embargo, puede durar mucho tiempo y procesar grandes cantidades de sedimentos y suelo.
Cada método y máquina tendrá sus ventajas y desventajas. Sin embargo, la clave es saber realizar modificaciones para adaptarlas al presupuesto de cada proyecto. Asimismo, debe ser un óptimo recurso que soporte las condiciones en el campo. Aunque, primordialmente deberá estar capacitada para reunir eficazmente las muestras que brinden datos relevantes a la investigación.
Esta máquina traslada el agua que sube desde su base, y por lo tanto permite que los materiales más ligeros puedan flotar en la superficie suavemente y verterse en un tamiz. El material que se deposita en el tamiz es la fracción más ligera, mientras que los artefactos depositados en el tanque, se identifican como la fracción pesada.
Aunque esto permite que muestras mucho más grandes sean procesadas, al contrario de la flotación manual, ésta requiere la pericia de un soldador, así como el acceso a piezas tales como tanques de almacenamiento y material de plomería.
Algunas máquinas de flotación, por ejemplo la Flote-Tech, permite que el agua sea reciclada (por lo que el agua no necesita ser cambiada después de obtener cada muestra). La construcción de esta máquina tiene un alto costo, sin embargo, puede durar mucho tiempo y procesar grandes cantidades de sedimentos y suelo.
Cada método y máquina tendrá sus ventajas y desventajas. Sin embargo, la clave es saber realizar modificaciones para adaptarlas al presupuesto de cada proyecto. Asimismo, debe ser un óptimo recurso que soporte las condiciones en el campo. Aunque, primordialmente deberá estar capacitada para reunir eficazmente las muestras que brinden datos relevantes a la investigación.
Secando las muestras
Tanto muestras pesadas como ligeras, son colgadas para su secado en la sombra. Sitio Arqueológico El Perú-Waka'.
Después de flotar el suelo, se extraen 2 tipos de muestras, la fracción pesada (que por lo general se compone de rocas, huesos grandes y otros materiales más pesados), y la fracción ligera (que consta de restos ligeros de plantas, tales como madera y semillas, así como huesos pequeños). Las muestras se colocan en la sombra y una vez secas, son embaladas y enviadas a un laboratorio para su análisis.
Trabajo de Laboratorio
Imagen que presenta el análisis de las muestras a través del uso de un microscopio de baja resolución.
El trabajo de laboratorio comprende de varios pasos y largas horas de trabajo con el microscopio. Aquí incluyo una descripción básica de los procedimientos.
1. Pesar la muestra completa.
2. Anotar la información en una hoja de análisis apropiada.
3. Movilizar la muestra a través de tamices anidados.
4. Pesar el contenido de cada tamiz por separado y colocarlo en recipientes etiquetados.
5. Todos los materiales mayores a 2.00 mm son separados, pesados e identificados. Los elementos menores a 2.00 mm, tanto semillas carbonizadas como fragmentos de plantas, son seleccionados y reportados en la hoja de análisis. Es importante señalar que no todas las semillas u otros restos carbonizados pueden ser identificados, por lo que son registrados como "desconocidos" o "semillas no identificadas".
6. Los restos de plantas se identifican por: ubicuidad, frecuencia (porcentaje), densidad, coeficientes de comparación e índices de diversidad.
7. Se toman fotografías de las semillas selectas y otros restos vegetales.
8. Los resultados son interpretados, publicados y/o se presentan en conferencias y charlas.
Creación de un Muestrario
Fruta y semillas de "huevos de caballo". (Stemmadenia donnell-smithii).
La creación de una colección de referencia es extremadamente importante, ya que ésta puede ser comparada con el material arqueológico colectado en las muestras. Asimismo, podrá identificarse el género o la especie de las plantas recolectadas.
Lo ideal es realizar la recolección de semillas y fragmentos de plantas acorde a la región donde se desarrolla un proyecto arqueológico. Otras posibilidades incluyen la solicitud de semillas a través de jardines botánicos y el intercambio de muestras con otras instituciones que conservan una colección abundante.
La creación del muestrario con especímenes de comprobación, es vital para el estudio macro y microbotánico.
Lo ideal es realizar la recolección de semillas y fragmentos de plantas acorde a la región donde se desarrolla un proyecto arqueológico. Otras posibilidades incluyen la solicitud de semillas a través de jardines botánicos y el intercambio de muestras con otras instituciones que conservan una colección abundante.
La creación del muestrario con especímenes de comprobación, es vital para el estudio macro y microbotánico.
Carbonización Experimental
Semilla carbonizada de chile. (Capsicum sp. )
No todos los elementos que conforman una planta reaccionarán de igual forma a la exposición del calor y carbonización. Por lo tanto, la carbonización de semillas selectas y fragmentos de plantas, deberán ser analizadas a través de un microscopio. Por medio de esta herramienta, se comprenderá cómo ciertas semillas se ven afectadas por diferentes grados de calor, y cómo su apariencia cambia. Este método ayudará a los especialistas a identificar el material analizado.
Referencias adicionales
Fritz, Gayle J. 2005. Paleoethnobotanical Methods and Applications. In Handbook of Archaeological Methods, edited by Herbert D.G. Maschner and Christopher Chippindale, pp. 771-832. Altamira Press, Walnut Creek, CA.
Hastorf, Christine A., and Virginia S. Popper. 1989. Current Paleoethnobotany: Analytical Methods and Cultural Interpretations of Archaeological Plant Remains. University of Chicago Press.
Pearsall, Deborah M. 2000. Paleoethnobotany: A Handbook of Procedures, 2nd Edition. Academic Press, San Diego, CA.
van der Veen, Marijke. 2011. Consumption, Trade and Innovation: Exploring the Botanical Remains from the Roman and Islamic Ports at Quseir al-Qadim, Egypt. Journal of African Archaeology Monograph Series, Vol. 6.Africa Magna Verlag, Frankfurt.